Generalmente en momentos como estos,
cuando miles de maestros se disponen a protestar en gran parte del país , son muchos
los interrogantes que se generan, para algunos son pretextos para no trabajar,
(ese tiempo se repone después ), otros alegan que solo nos interesa un sueldo
mas elevado y obviamente para el gobierno como siempre estas manifestaciones
son tan injustas como cualquier inconformidad que el pueblo
manifieste, porque en Colombia “todo esta bien" mas si nos jactamos de ser el país mas feliz del mundo pero nada es lo que parece. 



La gente que no tiene ninguna vinculación con la docencia ,critica
nuestro actuar y el negarnos a ser evaluados. Error ,los maestros no nos oponemos a esa medida, personalmente considero que es necesaria pues también es
cierto que en el gremio hay maestros que aún imparten una educación con
tendencias anti vanguardistas , enfocados en la obsoleta metodología de la mecanización
y de transcribir conceptos sin oportunidades de innovación de los mismos y también el maestro que aunque sabe mucho no tiene la pedagogía para enseñar ,por
ende nadie le entiende. Sin embargo somos miles los maestros que si estamos enamorados de nuestra profesión , que nos actualizamos constantemente y educamos a conciencia, tal vez esa es una de las razones para protestar ya que tenemos toda la intención pero las herramientas son precarias.
El temor de la evaluación trasciende de lo ético a lo político y
la incertidumbre aumenta porque el docente evaluado no tiene derecho a saber en
que se equivocó o peor aun puede perder su puesto porque a sus directivos les
vino en gana o no es de sus afectos, la evaluación en Colombia es una farsa ,
no evalúa el conocimiento y las capacidades ,Lo que busca es que los nuevos
docentes no puedan ascender para evitar que sus sueldos aumenten y obviamente
la nomina mensual en cada departamento podría causar un “caos” económico, menos
recursos para pagarle a los dirigentes de este país.
Tal vez aquel que critica al maestro no sabe que lo que exige esta
ligado a muchos años de estudio, de
sacrificios, que apenas se es nombrado se requieren de 10 a 15 años para
llegar a la máxima categoría ( con un sueldo
profesional irrisorio comparado con otras profesiones que no dependen de
escalafón ) ,aunque permanece en el colegio 6 horas, su labor se extiende a 2 0
3 horas mas preparando clase, revisando trabajos, investigando y corrigiendo
sus propios errores.
Hay quienes piensan que el maestro toda la vida ha tenido cerca su
colegio, muchos tuvimos que trabajar primero en veredas, caseríos, pueblos
donde algunos de estos ni siquiera tienen carretera ; trochas, quebradas, largas horas de
camino, nos separaron de seres queridos
e hijos durante 5 días a la semana, incluso un mes cuando las veredas estaban
totalmente aisladas y este momento muchos maestros nuevos se encuentran en esta
situación, todo por una consigna cuando se ama una profesión ¡ educar ! . Es
bueno aclarar que existe pequeño auxilio para quien trabajaba en esas zonas, el
cual ahora esta condicionado por conveniencias políticas, un auxilio insignificante que no compensa tales sacrificios.
Usted , apreciado lector sabe que en Colombia los salones están
atiborrados de estudiantes por eso de la cobertura, salones donde escasamente
se puede respirar, los docentes también se enferman y cuando piden una cita
(vía telefónica es imposible) , esta le es dada para 5 días después o más ,
cuando ya están curados de su dolencia y por urgencias, debe estar al borde de la
muerte para que sea considerada urgencia, esto pasa con los docentes y sus beneficiarios ,
será que no tememos derecho a exigir mejor atención cuando en promedio nos
descuentan $2500000 al año y mucho mas si es pensionado.
Para finalizar, el mas despistado asegura que los maestros solo
salen a protestar cuando les tocan sus bolsillos, hemos protestado por el
hacinamiento, por lo poco que se
invierte en la infraestructura de los colegios, porque los pocos recursos que
se envían a los colegios para mejoras locativas, pagar servicios, son retenidos
en las diferentes alcaldías sin una explicación valedera , hemos protestado por
la manera como el gobierno exige calidad pero no la garantiza , porque es
preferible invertir en el negocio de la guerra, pagarle sumas astronómicas a
los “altos” funcionarios mientras el resto de Colombia (no solo los maestros)
recibe limosnas, lo poco que el gobierno se invierte en los colegios no son favores, son obligaciones.